A medida que los mercados una vez más pugnan por acercarse a máximos históricos – el tono excesivamente exuberante, la complacencia extrema y debilidad en los datos económicos, trae a la mente de Bob Farrell 10 antiquísimas y no por ello faltas de sentido, normas de inversión.
Estas reglas deben ser un elemento básico para cualquier inversor de éxito a largo plazo. Estas reglas se citan a menudo pero rara vez son atendidas – al igual que lo son ahora. Bob Farrell es un veterano de Wall Street, con más de 50 años de experiencia. Farrell obtuvo su maestría en la Escuela de Negocios de Columbia y empezó como analista técnico de Merrill Lynch en 1957.
A pesar de que Farrell estudió análisis fundamental con Gramm y Dodd, se volvió hacia el análisis técnico tras darse cuenta de que había algo más en los precios de las acciones que en sus balances y cuentas de resultados.
Farrell se convirtió en pionero de los estudios de sentimiento y de la psicología del mercado. Sus 10 normas sobre la inversión se derivan de la experiencia personal con los mercados poco transparentes, los mercados alcistas, los mercados bajistas, los crashes y las burbujas. En resumen, Farrell ha visto y vivido de todo para contarlo.
Las 10 reglas de la inversión (parte I):
1. Los mercados tienden a volver a la media (precio medio) con el tiempo:
Como una goma elástica que se ha estirado demasiado lejos – debe ser relajada con el fin de ser estirada de nuevo. Esto es lo que ocurre en las cotizaciones de las acciones que se anclan a sus promedios móviles. Las tendencias que llegan a extenderse demasiado en una dirección u otra, siempre vuelven a su media a largo plazo.
Incluso durante una fuerte tendencia alcista o bajista, los precios suelen moverse de nuevo (vuelven) a una media móvil a largo plazo. El gráfico de la izquierda muestra al índice americano S&P500, con una media simple de 52 semanas.
La ventana inferior del mismo gráfico muestra la desviación porcentual del precio con respecto a la media móvil de 52 semanas. En mercados con tendencia alcista hay reversiones periódicas a la media que crean oportunidades de compra. Sin embargo, lo que no se dice a menudo, es que con el fin de tomar ventaja de estas oportunidades debería haber vendido su cartera cuando la desviación de la media llegó a extremos históricos.
Por el contrario, en los mercados bajistas tendenciales, tales reversiones extremas en las desviaciones se deben utilizar para vender acciones, obtener efectivo y reducir el riesgo de cartera en lugar de vender en el pánico típico de los suelos de mercado. Las líneas discontinuas rojas indican que los mercados cambiaron las tendencias de positivo a negativo. Esta es la esencia misma (según Farrell) de la gestión del riesgo de la cartera.
2. Los excesos en una dirección darán lugar a un exceso opuesto en la otra dirección:
Los mercados que rebasan al alza también se rebasan a la baja, como una especie de péndulo. Cuanto más lejos se mueva a un lado, más rebotará hacia el otro lado. Esta es la extensión de la regla número 1, ya que se aplica a los ciclos del mercado a más largo plazo (mercados cíclicos y seculares).
Mientras que el cuadro anterior mostró cómo los precios se comportan en una base a corto plazo – en una base a largo plazo los mercados también responden a la 3 ª ley de Newton del movimiento: «Por cada acción hay una reacción igual y opuesta«.
El primer gráfico muestra que los mercados cíclicos llegan a extremos cuando se alcanzan múltiplos de 3 o más en la desviación estándar por encima del movimiento promedio de 50 semanas.
Por primera vez desde los mínimos del mercado en 2009 esto ha vuelto a ocurrir. Tenga en cuenta que estos excesos NUNCA se operan tan sólo con posicionarse bajista en cuanto tenga esta señal.
El segundo gráfico muestra las reversiones de precio del S&P500 en una base a largo plazo y ajustado por inflación. Tenga en cuenta que cuando los precios históricamente han llegado a extremos – la reversión de los precios es extrema. Es evidente que la línea de reversión en el mercado de valores está todavía en niveles a partir del pico del 2000.
3. No hay nuevas eras – los excesos nunca son permanentes:
Siempre habrá alguna «cosa nueva» que suscite el interés especulativo. Estas «cosas nuevas» en la historia, son como «cantos de sierna» y ha llevado a muchos a los inversores a su desaparición.
De hecho, durante los últimos 500 años hemos visto burbujas especulativas con todo, desde bulbos de tulipanes a los ferrocarriles, Servicios de Tecnología de Mercados Emergentes (5 veces) a los automóviles y las materias primas.
Se comienza siempre de la misma manera y se termina con los enunciados de «esta vez es diferente«. Como Jesse Livermore dijo una vez:
Una lección que aprendí pronto es que no hay nada nuevo en Wall Street. No hay nada porque la especulación es tan vieja como las montañas. Pase lo que pase en el mercado de valores ya habrá pasado antes y volverá a suceder.
4. Un rápido aumento o caída de los mercados suele ir más allá de lo que piensa:
La realidad es que los excesos, como el que estamos viendo en el mercado ahora, puede ir mucho más allá de lo que la lógica dictaría.
Sin embargo, estos excesos, como hemos dicho, nunca se operan simplemente en las lecturas extremas.
Las correcciones son siempre tan brutales como los avances. En el gráfico de la izquierda se muestra cuando los mercados se escaparon de sus tendencias direccionales – Las rectificaciones se produjeron poco después.
5. El público compra más en la parte superior y menos la de la parte inferior:
El inversionista individual promedio es más alcista en las cimas del mercado y pesimista en la mayor parte de los suelos del mercado bajista.
Esto es debido a los sesgos emocionales del inversor, la «avaricia» cuando los mercados están subiendo y el «miedo» cuando los mercados están cayendo.
La lógica dictaría que el mejor momento para invertir es después de una liquidación masiva – por desgracia esto es exactamente lo contrario de lo que los inversores hacen. La siguiente tabla muestra el flujo de dinero hacia fondos de inversión de renta variable.
Traducción de Javier Alfayate, editor e investigador de mercados.
Escelente articulo de lo que nos pasa a los inespertos esperemos aprender de el gracias Javier
Casi siempre el enemigo intimo como dice G.F.es el que nos la juega, ahí esta la mayor parte de la labor
Saludos