Ayer pudimos leer en elEconomista la nueva intervención del premio Nobel de Economía, Paul Krugman, que participó en el programa Squawk on the Street de la CNBC, donde ha dejó claro que el problema de España y de la Eurozona en general, «no es el nivel de endeudamiento sino las restricciones de tener una moneda única sin un gobierno central«.
Desde su punto de vista, la dinámica económica del Viejo Continente antes de la crisis financiera de 2008 era mucho mejor si se compara con Estados Unidos. Asimismo, ha señalado: «Si miramos atrás 30 o 40 años, los países europeos no están tan mal como pensamos». «El único error que han cometido es tener una moneda única sin un gobierno único», ha reiterado de nuevo.
«Hasta 2007, las cuentas de muchos países europeos eran mucho mejores que las de EEUU en muchas áreas», ha explicado al mismo tiempo que ha dejado claro que el gobierno de Bush debería haber utilizado los años de bonanza económica «para reducir los niveles de deuda» y no comenzar dos guerras y activar una bajada de impuestos como ocurrió en 2004.
En este sentido, y ante el llamamiento de muchos para aumentar los impuestos a las rentas más altas, Krugman ha asegurado que EEUU «no puede resolver su déficit presupuestario solamente incrementando la fiscalidad a los más ricos» pero aclaró que mediante esta subida de impuestos se podría «ayudar» a corregir el desajuste en las cuentas.
Hola Javier,
Yo también sigo confiando en los mercados y por eso me gustaria saber tu opinión sobre dos valores de la bolsa suiza: Nestlé y Novartis, tienen muy buena pinta.
El mejor de Suiza es SGS N.
Estos dias estoy fuera de la oficina y no puedo responder extensamente ni a todos. Gracias por las opiniones y comentarios.
Los recortes recaen, y recaerán, en los hombros de los más débiles.
Espero que no hagan desaparecer medidas sociales como las pensiones, el paro y las pagas extraordinarias, por cierto no creadas ni por Suárez ni por González ni por Aznar ni por Zapatero (y menos por Artur Mas o Pujol), sino por, ay…. Franco y Primo de Rivera.
Gracias a las autonomías tenemos un Estado casi huero, una Administración enormemente más cara, grande e ineficaz y unos nacionalismos más encrespados que nunca.
España tiene que solucionar primero su problema regional, una de cuyas consecuencias (no la única) es la ruina fiscal.
Renunciar a más soberanía que nadie no nos ha dado más seguridad que a quienes como Gran Bretaña quisieron conservar toda la posible. Tampoco nos ha defendido de la ruina, de la que estamos cerca, ni de la descomposición.